Los mamones comemierda a los que hemos votado se han crecido tanto
con nuestro miedo que se piensan que les pertenecemos y que no pasamos de ser
más que unas miserables sabandijas.
La indignación popular, tarde o temprano, les pedirá cuentas y les pasará factura. He
aquí un ejemplo que nos ofrece un viejo amigo:
AL SOCIALISTA JÁUREGUI
No mereces que te preste
ni un minuto de mi atención
para contestar tus desvaríos,
pero aprovecho la ocasión
que tan grosera y odiosamente
nos brindas a toda la gente
que pretendemos salirnos
de la tostadera.
Sé que en el baile de marionetas,
pintas menos que Tomasa en los títeres,
pero te apuntas a ese juego indigno,
como muchos de tu partido,
para figurar en los zafios
mentideros de la caverna.
"A los no vacunados
hay que tratarnos como apestados,
si es posible aislarnos,
y que nos vayamos
a vivir a
la montaña
a meditar como eremitas".
Vaya demócrata de pacotilla,
haciéndoles el trabajo sucio
a tus conmilitones turbios
del odio, la calumnia y la mentira.
¿Quién te ha dicho
que la vacuna es segura,
si está en fase de experimentación?
¿Pretendes obligarnos a ser cobayas?
Si te has vacunado, estás inmunizado.
¿Qué te importa si nosotras
no lo estamos por voluntad propia?
¿Para qué, Jáuregui, tanto miedo?
Que te inyecten un placebo
y te haces fotografías en la prensa,
así seguirás luciendo tus patochadas.
Si estás aburrido dedícate a otra cosa.
Déjanos tranquilas a las personas
que queremos vivir nuestra vida
y no añadas más mierda
en el contenedor
de la pandemia.
21/08/2120
Rafael Campillo Sendra
No hay comentarios:
Publicar un comentario