jueves, 29 de julio de 2021

 

LOS INSOPORTABLES NEGACIONISTAS

 

Galileo aportó en su época una verdad científica impresionante. No era el Sol quien giraba alrededor de la Tierra, sino al contrario: la Tierra era quien giraba alrededor del Sol.

-¡Maravilloso, tú sí que eres un científico auténtico!, –le dijeron sus colegas, el Papa y la Inquisición- pero no te lo vamos a aceptar, ni vamos a investigarlo. Es más, nos caes fatal y te vamos a joder todo lo que podamos por dejarnos en ridículo.

Todos los estamentos que representaban el conocimiento de aquella época adoptaron el negacionismo radical contra la cosmogonía que Galileo, currándoselo bien currado, les proponía.

El EGO tiene dos cosas claras, clarísimas: no aguanta que otro EGO le corrija demostrándole que está equivocado y no duda acerca de tener más razón que los demás pase lo que pase, porque él lo vale.

Hoy día se tilda de negacionistas a quienes no les cuadra que el Sol en España salga por el cabo de Finisterre. ¡Pero, tíos, si lo ha dicho la TV!

Por suerte, el virus, los muertos, los contagiados a mansalva están ahí. Son la única realidad evidente. No puede ser que todo el mundo engañe. Las vacunas son inocuas, lo han dicho Belén Esteban, Risto Mejide y el resto de presentadores, doctores, y todo bicho viviente que asoma la geta por la caja tonta.

¿Por qué meten mierda esos seudo científicos que achacan la crisis de los infectados a las antenas de radiotelefonía, los chemtrails, la contaminación, los alimentos transgénicos, las vacunas contra la gripe, las terapias experimentales genéticas con grafeno, etc.? ¿Es que no quieren que derrotemos al malvado virus llegado directamente del infierno para aniquilarnos?

¡Los muy cerdos pretenden desprestigiar las mascarillas diciendo que producen hipoxia y hongos pulmonares!  

Se quejan porque les cortan sus canales en Internet, porque no les dejan debatir en TV, porque sus recursos contra las decisiones gubernamentales, (que nos protegen admirablemente cercenando o restringiendo nuestros derechos fundamentales), no prosperan en los tribunales… y hasta se llevan las manos a la cabeza porque no queremos informarnos mejor leyendo revistas y libros conspiranoicos escritos por científicos fracasados, que presumen de independientes.

Es una situación terrible y lamentable. Quieren asustarnos con muertos y enfermos graves que se vacunaron y al poco tiempo sufrieron coágulos, trombos y patologías inflamatorias o tormentas de citoquinas. Incluso se atreven a criticar la prohibición de hacer autopsias y califican de contraproducentes las terapias aplicadas a los afectados, sólo porque unos médicos italianos consideraron criminales sus propias terapias.

Hasta la fecha hemos sido muy tolerantes con ellos. Pero todo tiene un límite. En este año 0 de nuestro Nuevo Orden Mundial, el justo brazo inquisidor de nuestro recto sistema ejecutará con rigor las medidas pertinentes para callar y doblegar a esos miserables. 

Y si persisten en el error, renunciando a viajar, yendo a trabajar sin estar vacunados y viviendo impunemente sin tarjeta sanitaria… les culparemos de todo lo malo que nos sucede y nos los cargaremos poco a poco, como el bueno de Hitler hizo con los judíos, tan desafectos a su brillante Régimen.

Es la ley, (del más fuerte, claro).

viernes, 23 de julio de 2021

Si no os participara esta información, no podría sentirme PERSONA. 

Ahí va, sin comentarios, salvo mi agradecimiento al autor del informe.


CONTENIDO DE LA VACUNA COVID-19

HOY ES SÁBADO, 10 DE JULIO DE 2021

En primer lugar, daré a conocer los organismos e instituciones oficiales donde entregué personalmente un informe de dos páginas con mi firma y DNI, advirtiendo de la existencia de brazos magnéticos tras la vacuna, junto al INFORME PROVISIONAL sobre el contenido tóxico encontrado en un vial de la vacuna contra la Covid-19, firmado por el Doctor en Ciencias Químicas y Licenciado en Ciencias Biológicas PABLO CAMPRA MADRID, junto a un equipo de científicos que trabajan en la Universidad de Almería.

Cabe señalar que ha aparecido un comunicado con el logotipo de esa Universidad negando su vinculación con dicho estudio. El escrito, sin embargo, no lleva firma ni rúbrica, es anónimo. Por tanto, tiene credibilidad «0».

Estas son las instituciones oficiales de Castilla La Mancha donde quedaron registrados los documentos:

—Director del Servicio de Salud de Castilla La Mancha (SESCAM).

—Consejero de Sanidad de Castilla La Mancha

—Delegado Provincial de Sanidad de Ciudad Real,

—Director Hospital «Virgen de la Salud» de Toledo.

—Gerente de Atención Primaria de Toledo.

—Director Hospital «Virgen de Altagracia» y GAI de Manzanares.

—Coordinador Centro de Salud de La Solana.

—Coordinador Centro de Salud Manzanares I.

—Coordinador Centro de Salud Manzanares II.

—Centro Médico de Membrilla.

Tras los dos audios compartidos en junio y diciembre del 2020, éste será probablemente el último que realice.

Pronto seremos testigos y protagonistas de un cambio de paradigmas a nivel mundial, no sólo en el orden político o sanitario, sino también en los de índole económico y social.

No me considero más inteligente que nadie, y tampoco soy un profeta; tan sólo he dedicado el último año y medio a ver, leer, investigar y comprobar.

Me he informado a través de los numerosos documentos y comunicados oficiales, y también he escuchado con atención a científicos que ponen en riesgo su trabajo y su prestigio, incluso la seguridad de su vida y la de su familia, por defender la ciencia basada en la evidencia.

Tengo que reconocer que fui de los primeros en ser engañado, al confiar en la versión oficial de nuestros gobernantes durante meses, incluido el supuesto comité de expertos. Como casi todos, me creí a pies juntillas la información que recibíamos a través de los conductos oficiales y los medios de comunicación.

Así fue hasta que comencé a observar los bandazos en las medidas adoptadas a comienzos del 2020, la criminal desprotección que sufrían mis compañeros sanitarios, y especialmente las decisiones gubernamentales que ponían en entredicho toda evidencia científica.

A quienes tachen mis afirmaciones de descabelladas están en su derecho, pero bien podría sucederles como en tiempos de Noé, cuando construía la barca en tierra firme y se reían de él. Lo hicieron hasta que comenzó el diluvio universal, en cuyo instante dejaron de hacerlo. Por desgracia ya era tarde.

A pesar de la gravedad de lo expuesto a continuación, quiero transmitir un mensaje de esperanza a los ya vacunados, pues tras descubrirse la existencia de un elemento tóxico en el vial analizado, sabemos ya de un fármaco que degrada y neutraliza dicho tóxico introducido en la vacuna experimental contra la Covid-19.

Mira tus brazos, los de tu familia y amigos. ¡Pregúntales! ¿Aparecen algunos magnetizados? Si es así debes presentarte en el centro de salud u hospital donde te vacunaron o te hicieron una PCR, y dejar allí constancia de lo que te sucede. Y recuerda: ¡EL SER HUMANO NO ES MAGNÉTICO!

ESTOS SON LOS HECHOS:

1º —Como sanitario que ha ejercido la profesión durante treinta y siete años, he sido y sigo siendo un firme defensor de las vacunas. Siempre he aconsejado a los pacientes que se vacunen para estar protegidos. Yo, y todos mis hijos, tenemos puestas todas las vacunas del Calendario Oficial de Castilla La Mancha.

Por tanto, nadie puede tacharme de ser «antivacunas», si no es faltando a la verdad. Sin embargo, lo que se está inyectando, además de ser un producto experimental, su composición ha sido mantenida en secreto por los laboratorios, hasta hoy.

2º —Sabemos que las vacunas contienen adyuvantes con algunos metales, como etilmercurio o aluminio, pero son cantidades tan pequeñas que no provocan ningún campo magnético que atraiga metales.

3ª —Gracias a algunas redes sociales que aún no sufren la censura sabemos que los detectores de metales están registrando impulsos magnéticos en el lugar donde se inyectó la vacuna. Yo mismo lo he comprobado personalmente.

4º —Hoy sabemos ya cuál es con toda probabilidad el elemento magnetizable oculto en la vacuna actual, con independencia del laboratorio que la elabore. Se ha descubierto también que el nocivo componente ya estaba presente en la campaña de vacunación 2019-2020 de la gripe que provocó la muerte de tantos ancianos.

5º —Cuando a comienzos del 2020 el número de muertos no dejaba de aumentar, varios médicos italianos se saltaron las leyes que prohibían hacer autopsias y comenzaron a realizarlas.

Para su sorpresa descubrieron que las muertes no estaban causadas por ningún virus, como falsamente nos estaban haciendo creer, sino por trombos cuyo origen se desconocía por entonces.

En cuanto comenzaron a tratar a los pacientes con anticoagulantes cesaron las muertes. Las cadenas de televisión ocultaron el transcendental hallazgo que estaba salvando vidas.

6º —Sabemos que en España un equipo médico del Hospital de Barbastro (Huesca) dio la voz de alarma tras investigar las muertes de ancianos en la primera ola. Los fallecidos habían sido vacunados de la gripe, mientras que los no vacunados, aun teniendo la misma edad y similares patologías, sobrevivieron casi todos.

A pesar de exponer tan sorprendente hallazgo al Ministerio de Sanidad, éste optó por ignorarlo, aduciendo que se trataba de personas mayores. Y otro tanto sucede ahora con las numerosas muertes por trombos, especialmente con la vacuna de AstraZeneca, justificándolas en que el «beneficio-riesgo es mayor».

7º —Al poco de vacunarse contra la Covid-19 murieron 9 ancianos en la residencia de Lagartera, y 16 en Ventas con Peña Aguilera, ambos pueblos de Toledo. En una residencia de Los Barrios (Cádiz) fueron 46 los fallecidos a los pocos días de recibir la vacuna. Y otro tanto sucedió en diversas residencias de toda España.

8º —Tengo amigos que presentan brazos magnetizados que, además de adherirse objetos metálicos como imanes, llaves y monedas, también dieron positivo cuando les apliqué el detector de metales y un sensor de campos eléctricos.

9º —También se han detectado elementos magnéticos en algunas vacunas del calendario oficial infantil. ¿Con que intención ocultan material magnético en una vacuna destinada a los niños?

10º —¿Qué vacunas provocan el electromagnetismo descrito? Todas: Pfizer, Moderna, AstraZeneca, Janssen...

Conforme pasan los días ese magnetismo se extiende desde el lugar de la inoculación al resto del brazo, el tórax, cuello, espalda, senos frontales, paranasales, ¡y la cabeza! Esto lo he comprobado yo mismo con detectores de medición propios. Tengo en mi poder los videos que lo demuestran.

11º —Mediante un simple multímetro puede comprobarse la variación del potencial eléctrico en diferentes zonas del cuerpo de algunos vacunados, lo que indicaría la existencia de campos eléctricos variables en dichas zonas.

Eso generaría campos magnéticos variables que explicaría por qué los vacunados unas veces atraen un imán o una llave, y otras los repelen, pues cada cierto tiempo pasa de positivo (+) a negativo (-), y viceversa. Yo mismo he comprobado este fenómeno con mis propios ojos.

12º —Se observa también dicho magnetismo en personas no vacunadas, pero que estuvieron expuestas a hisopos para una PCR y mascarillas que contenían nanopartículas de GRAFENO. Un gran número de esas mascarillas fueron retiradas en comunidades como el País Vasco, Castilla y León, Castilla La Mancha y comunidad de Madrid tras hallarse dicho material tóxico. Lo más sorprendente es que, a fecha de hoy, siguen comercializándose libremente.

13º —Existen fundadas sospechas de que las nanopartículas de GRAFENO también son inhaladas a través del aire. Se han encontrado metales pesados en terrazas tras el paso de aviones que dejaban grandes estelas, habiéndose descartado que se tratase de humo o vapor de agua. También algunos agricultores manifestaron tener un sabor metálico.  

14º —No todos los hisopados por una PCR dan positivo al magnetismo, como tampoco la totalidad de vacunados, por lo que cabe pensar que, al tratarse de una vacuna experimental, a unos les inyecten el principio activo, mientras que otros reciban placebo.

Lo que sí conocemos ya es la sustancia contenida en el vial analizado: nanopartículas de ÓXIDO de grafeno. Quedan pendientes dos pruebas más, entre ellas una espectrometría. Hoy por hoy está demostrado que el GRAFENO origina trombos mortales y deja los brazos magnéticos.

15º —Las nanopartículas encontradas en la vacuna coinciden plenamente con la estructura molecular del ÓXIDO de GRAFENO. Se trata de un superconductor que, además de enviar, también puede recibir señales activadas de forma remota mediante ondas de antenas 5G.

Parece ciencia-ficción, pero es real. Lo demuestran los innumerables estudios científicos publicados, al alcance de cualquiera con inquietudes.

16º —Estudios científicos demuestran igualmente que el ÓXIDO de GRAFENO tiene predilección por fijarse en el cerebro, permitiendo modular la conducta humana e influir en los sentimientos y las emociones a través de ondas emitidas de forma remota desde el exterior.

17º—Se sabe igualmente que, a través de las nanopartículas de GRAFENO y utilizando un ancho de banda que emitirán próximamente las antenas 5G, es posible insertar imágenes nuevas en nuestro cerebro como si las hubiésemos visto antes. Esto puede ya hacerse.

18º —Como prueba de esta realidad presente aquí y ahora, conozcamos tres declaraciones públicas realizadas por presidentes de gobiernos:

PRIMERA declaración: Sebastián Piñera, presidente de Chile. Durante el acto de presentación oficial de la tecnología 5G en su país manifestó esto que pone los pelos de punta:

«El 5G es la posibilidad de que las máquinas puedan leer nuestros pensamientos, incluso puedan insertar pensamientos, insertar sentimientos. El 5G se va a transformar en el verdadero sistema nervioso de nuestra sociedad».

SEGUNDA declaración: Recientemente ese mismo presidente de Chile afirmó públicamente lo siguiente: «El 14 de junio de 2019 se estableció un acuerdo de 12.000 millones de dólares… ¡«PARA EL FONDO DE COVID ORIGINAL»! ¡Qué casualidad! ¡Seis meses antes de conocerse los primeros casos de la Covid ya tenían firmado su presupuesto!

TERCERA declaración: Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España, se burlaba en el Congreso de un miembro de la oposición con fina ironía, refiriéndose al «control de las personas mediante la nueva tecnología 5G», cuando nadie había mencionado ese tema. Recientemente he compartido estos tres videos de treinta segundos cada uno, pero puedo enviárselos a quienes lo soliciten.

19º —Ya son miles los vacunados en España que presentan el magnetismo en su cuerpo tras recibir esta vacuna experimental. Los efectos secundarios y las muertes que está provocando son de tal calibre, que «los de arriba» no pueden ocultarlo y lo justifican diciendo que se trata de bulos o fakes news.

Sin embargo, ya proliferan los testimonios de policías, abogados, militares, médicos y catedráticos con familiares directos que presentan ese magnetismo. Entretanto, las televisiones subvencionadas y personajes de la farándula como Pablo Motos, Risto Mejide o Belén Esteban se burlan de tan graves hechos.

20º —Si nuestro brazo aparece magnetizado con metales, monedas o llaves debemos acudir inmediatamente al centro de salud u hospital donde nos pusieron la dosis y exigir que el médico refleje en la historia clínica lo que nos pasa. Pedir, además, el justificante impreso de nuestra reclamación una vez reflejada en la historia clínica.

21º —Vemos que la televisión hace bien su trabajo, pues los imantados no se atreven a acudir a sus centros de salud ante el temor de ser motivo de burlas. Por esa razón, el personal sanitario, que mayoritariamente desconoce este fenómeno, tiene la obligación de preguntar a los pacientes si ellos o algún familiar experimentan este fenómeno.

22º —Dicho personal sanitario tendrá que tomar una decisión, pues si continúa vacunando para obedecer órdenes superiores, deben saber que la obediencia debida no exime de culpa ante la justicia, como ya sucediera en el juicio de Nuremberg contra los nazis.

23º —Sabemos que existe una relación directa entre el número de vacunados por países, y el drástico incremento de muertos en esos países tras la «vacuna». Tres claros ejemplos de esto son la India, Israel y Hungría. 

Naturalmente esas noticias son silenciadas en los telediarios, pues de lo contrario el periodista es despedido.

24º —La doctora española Amaia Foces que trabaja en la India, país donde un familiar mío me confirma que las muertes se cuentan por millares, manifiesta con sorpresa en un programa de televisión que los que se contagian y mueren están ya vacunados.

25º —El personal sanitario que está inoculando una «vacuna» que deja brazos magnéticos tiene la obligación de detenerla y exigir una explicación urgente y convincente a sus gerentes y consejeros.

Más si cabe cuando el ÓXIDO de GRAFENO provoca un cuadro caracterizado por: neumonías bilaterales, inflamación multiorgánica, alteración del sistema inmunológico, anosmia y sabor metálico, trombos, coagulación sanguínea, y tormenta de citoquinas…

¡Justo el mismo cuadro grave que presentaban los pacientes con Covid-19 que ingresaban en las UCIs y los ancianos que morían en sus residencias a comienzos del 2020!

26º —Ya sabemos que la «vacuna» contiene ÓXIDO DE GRAFENO, una sustancia que no es metálica ni magnética, pero que se magnetiza en contacto con la temperatura corporal y el hidrógeno del cuerpo. 

Este ÓXIDO de GRAFENO es el causante de los trombos que acaban con la vida de personas al poco de vacunarse, jóvenes sanos incluidos. Baste recordar lo sucedido con la vacuna de AstraZeneca... ¡y la siguen inoculando!

27º —Sabemos que los campos magnéticos provocan acumulación de glóbulos rojos a consecuencia del magnetismo, lo que se conoce como «efecto rouleaux». 

Dicho apilamiento y la posterior formación de trombos guardan una relación directa con la intensidad del campo magnético al que son sometidos los glóbulos rojos.

28º —Si conseguimos que todo esto se convierta en «voz pupuli» tal vez podamos detener esta tragedia de proporciones apocalípticas. 

¿Qué padres permitirán que vacunen a sus hijos con este producto sabiendo que les vuelve magnéticos y provoca trombos?

29º —El ya próximo encendido de las antenas de telefonía móvil 5G generará enormes campos electromagnéticos simultáneos en todo el mundo. 

Ateniéndonos a todo esto, no es preciso ser un genio para prever que dichas antenas multiplicarán las enfermedades raras, muertes por infartos, ictus, embolias pulmonares y muertes súbitas.

Fue lo que sucedió a comienzos del 2020 con los ancianos, pues la vacuna de la gripe del 2019-2020 llevaba ya el tóxico GRAFENO.

30º —La Organización Mundial de la Salud anunció ya que la pandemia del 2021 será mucho peor que la de 2020. ¿Cómo lo sabe? 

Y más recientemente nos han advertido que nos espera un «tsunami» cerebral de enfermedades psiquiátricas debidas al coronavirus. ¿Se han vuelto adivinos? ¿No será que son ellos mismo quienes manejan las «olas», las «mutaciones» y los «tsunamis»?

31º —¡Despertemos! Dejemos ya de creernos la información proveniente de las televisiones subvencionadas con cientos de millones de euros para transmitir el discurso oficial que nos infunde el miedo que nos paraliza; un miedo que nos impide reflexionar primero, y reaccionar después.

Y desechemos de una vez por todas la idea de que nuestros gobernantes, sean del signo político que sean, buscan lo mejor para nosotros, porque han demostrado no ser cierto.

32º ¡El cuerpo humano no es magnético! No es normal que se le adhieran imanes ni objetos metálicos como tijeras, tenedores, llave inglesa, alicates o teléfonos móviles al brazo de tantos vacunados o con una PCR previa.

Nadie me lo contó, lo he visto con mis propios ojos tras pasar un detector de metales por el brazo de un vacunado, y siempre comenzó a pitar en el lugar de la inoculación. Y lo mismo sucedió en los senos frontales y paranasales.

33º —La empresa turca Nanografi está elaborando la nueva vacuna contra la Covid-19 intranasal, mucho más potente que la vía parenteral, pues pasa directamente de la nariz al cerebro a través de los nervios olfatorios.

De esta forma el GRAFENO no podrá neutralizarse ni degradarse, ni por las defensas del organismo ni por ningún fármaco.

34º —La pregunta que todos deberíamos plantearnos es: ¿qué tiene que ver una empresa como Nanografi, dedicada al grafeno, con la vacuna contra la Covid-19? 

¿No tendrían que encargarse de tal menester los laboratorios y las farmacéuticas? Quienes no lo ven ya es porque están ciegos.

35º —Los hechos son tozudos, y demuestran que nos enfrentamos, no a un agente biológico como nos han hecho creer, sino al ÓXIDO DE GRAFENO. 

Este superconductor, que se va depositando principalmente en la cabeza de los vacunados e hisopados con una PCR, es capaz de emitir y recibir señales externas que modulan y controlan las neuronas.

Y para activarlo precisan de las antenas 5G, implantadas a marchas forzadas el pasado 2020, mientras nos mantenían confinados en nuestros domicilios.

36º —Los mismos dirigentes nacionales y mundiales nos advierten ya de una catarata de enfermedades psiquiátricas, tipo psicosis, esquizofrenias, trastorno bipolar y paranoias, aduciendo que estarán provocadas por el virus.

Pero hoy sabemos que el famoso virus jamás fue secuenciado, ni aislado, ni cultivado. Vamos, que no cumple ninguno de los cinco «postulados de Koch» que demuestran la aparición de un nuevo microorganismo.

37º —Disponemos del tiempo justo hasta que enciendan las antenas 5G. A partir de ese momento aparecerán las enfermedades psiquiátricas repentinas, así como miles de muertos en nuestras calles. Un fenómeno que se verá multiplicado en los vacunados, pues el ÓXIDO de GRAFENO actúa como multiplicador de las ondas 5G que destrozan las células del cuerpo.

Sin embargo, los medios de «desinformación» ya se encargarán de propagar la noticia de que todo es culpa de los jóvenes, de la variante «Delta», y especialmente de los no vacunados. Todo tan falso como una moneda de 3 euros de cartón.

A pesar de tanta advertencia, una mayoría, presa del pánico, saldrá corriendo a inyectarse o inhalar precisamente el tóxico que lo origina. El sentido común brilla hoy por su ausencia, y muchos hemos olvidado a quién culpó Nerón del incendio de Roma que él mismo había provocado.

38º —A partir de ahora, si nos quieren seguir llamando «conspiranoicos», «antivacunas» o «negacionistas» a quienes denunciamos estos hechos, que lo hagan. Pero antes que nos expliquen por qué los brazos se vuelven magnéticos tras la vacuna, y por qué se ocultó la existencia del ÓXIDO DE GRAFENO a quienes confiaban en las autoridades y el personal sanitario.

No sólo se ha encontrado este tóxico en el vial de Pfizer, sino que otra universidad ha mostrado fotos, sacadas de la vacuna de AstraZeneca, estando a la espera del correspondiente informe oficial.

39º —Esos de «arriba» hace tiempo que no esconden sus criminales propósitos. El propio Bill Gates (que ni se vacuna ni vacuna a sus hijos) manifestó sin inmutarse en 2010 lo siguiente: «Tenemos una superpoblación. El mundo tiene casi siete mil millones, y nos dirigimos hacia los diez mil. Ahora, si hacemos un gran trabajo con vacunas, atención médica y servicios de salud reproductiva, podríamos disminuir esa cifra quizás un 10 o un 15%». La afirmación fue realizada durante la conferencia en el Technology Entertainmet Desigh.

40º —Otro peso pesado de esta élite masónica-satanista que tampoco se oculta es Christine Lagarde, la directora del Banco Central Europeo.

Antes de la pandemia ella lanzó esta aterradora afirmación: «Los ancianos viven demasiado, y eso es un riesgo para la economía mundial. Tenemos que hacer algo, ¡y ya!» (FUENTE: Diario de Ibiza. 26 de diciembre de 2017). Lo que les sucedió después con los ancianos todos lo sabemos.

41º —Se acercan tiempos duros. Lamento ser portador de malas noticias, pero prefiero decir la verdad, aunque no guste, antes que las mentiras que nos agradan. Nos va la vida en ello.

Los médicos de Estados Unidos ya se están negando a tratar a pacientes afectados por los trastornos graves provocados por esta «vacuna»: temblores, convulsiones, dolores de cabeza y parálisis. Lo denominan «diagnóstico de trastorno de conversión», pues no saben ya cómo llamarlo.

42º —Para quienes les falta una dosis o desean vacunarse a toda costa, adelante, están en su derecho de hacerlo. Sin embargo, las numerosas muertes repentinas por infartos e ictus en personas jóvenes aconsejan esperar hasta que Fernando Simón, la ministra de Sanidad o el propio presidente ofrezcan explicaciones razonables y convincentes.

Ellos sí saben qué lleva la «vacuna», como también cuál es su finalidad, y seguro que no será nada bueno para nosotros. Pero guardarán un silencio cómplice como hasta ahora. Se trata del silencio que les delata, pues como reza el dicho castellano: «Quien calla otorga».

43º —A la espera del análisis de doce viales más, ya sabemos cuál es el componente principal del vial analizado: el 98-99% es ÓXIDO DE GRAFENO. Este crucial hallazgo fue transmitido por la televisión en el programa «El gato al agua».

A día de hoy ya está dando la vuelta al mundo. Debe detenerse la vacunación a nuestros hijos, al menos hasta que las autoridades responsables ofrezcan una explicación clara y convincente.

44º —Cuando se haga viral que nos estaban inoculando ÓXIDO DE GRAFENO oculto en la vacuna, ¿qué pueden argumentar quienes están detrás?

¿Nos dirán que fue para protegernos de un virus que a día de hoy no han demostrado su existencia?

¿Que fue para que el ARN mensajero fuera más efectivo?

¿Que también cura el cáncer?

¿Que nos lo ocultaron para no alarmarnos?

¡Muchos se lo creerán! Ya lo manifesté en mi anterior audio: estos psicópatas genocidas de guante blanco nos toman por idiotas.

45º —No olvidemos, ni por un segundo, que nuestros hijos y nietos son las siguientes víctimas que recibirán en agosto o septiembre próximo este producto tóxico. Lo ha afirmado la siniestra ministra Celaá. Sí, la misma que afirmó que «los hijos no pertenecen a los padres».

Nuestros hijos confían plenamente en sus padres, ¡no podemos defraudarles! Pueden hacer lo que quieran con nosotros, pues tienen el poder y los medios de comunicación a su disposición, pero… ¡nuestros hijos y nietos no se tocan, son sagrados!

Una cosa más, no firmemos ningún documento que nos haga responsables de cuanto les suceda a nuestros hijos durante el horario escolar. De hacerlo seremos consentidores de cuanto les hagan, incluida la inoculación de vacunas con el mortífero GRAFENO.

46º —La élite se siente tan segura de su triunfo que ya no se esconde. El mismo fundador y presidente del Foro Económico Mundial, Klaus Szhwab, ha anunciado que cuando completen la Agenda 2030… «todos serán felices, aunque no tendrán nada».

¡Y lo afirma sin inmutarse, sin ni siquiera pestañear! La hoja de ruta de dicha agenda, para quienes la desconocen, incluye: la vacunación a todo el mundo, el encendido de las antenas 5G, el Gran reseteo, el colapso financiero, el hundimiento de las bolsas, la introducción de la moneda única, y un ciberataque a escala mundial que culminará con el apagón de Internet. ¿Habían escuchado esto antes? La mayoría seguro que no.

47º —Con el mencionado apagón, conocido como Ciber Polygon 2021, perderíamos todo acceso a Internet, al transporte, la electricidad, al agua, los combustibles, y a nuestro dinero en las entidades de crédito.

Esto último salvará al Estado Profundo del colapso financiero en el que están inmersos sus grandes bancos. Al desaparecer los saldos de todas las cuentas de los ciudadanos perderemos todos los activos, además de cortar las comunicaciones, transacciones y suministros.

Se trata de un ciberataque de falsa bandera del que podrían culpar a cualquiera, por ejemplo, a piratas informáticos rusos.

48º —Estamos inmersos en una guerra entre el bien y el mal, entre David y Goliat. Se trata de una guerra que se libra, no con armas de fuego, sino con la información.

La primera batalla está perdida, pues «los de arriba» cuentan con el poder y el dinero, además de tener a su disposición los medios de comunicación de masas. Pero hay motivos para la esperanza, especialmente de los ya vacunados.

El hecho de que las autoridades supranacionales hayan insistido tanto en poner dos dosis, incluso una tercera, así como revacunar cada seis meses, hacía pensar que el ÓXIDO DE GRAFENO se elimina o degrada con el tiempo. Hoy ya sabemos que existe una sustancia que degrada ese ÓXIDO DE GRAFENO contenido en la «vacuna», actuando como antídoto.

Se trata de la N-Acetilcisteína (NAC), el precursor del GLUTATIÓN. Se trata de un fármaco barato que no precisa receta médica. Eso sí, que nadie lo tome sin consultar antes con un médico o farmacéutico de confianza.

Vemos que se hace realidad el adagio: «Cuando el mundo nos cierra una puerta, Dios nos abre una ventana».

49º —En Alemania, un grupo formado por casi 1.000 médicos llamado «Doctor for Information», que cuenta ya con el respaldo de 7.000 profesionales entre científicos, abogados y profesores, han realizado una impactante declaración durante una conferencia de prensa internacional:

«El pánico del coronavirus es una obra de teatro. Es una estafa, una farsa. Ya es hora de que entendamos que estamos en medio de un crimen mundial» (FUENTE: Alerta Digital. 06 de junio de 2021).

En España, un grupo de 600 médicos, llamado «Médicos por la verdad», realizó una declaración similar en otra conferencia de prensa: «Covid-19 es una falsa pandemia creada con fines políticos. Es una dictadura global con una excusa sanitaria. Instamos a todos a que detengan esta operación criminal difundiendo la verdad».

50º —Estos dos grupos de profesionales se han unido con otros de todo el mundo en la llamada «Alianza Mundial de Médicos», compuesta por más de 100.000 profesionales de la salud. Todos ellos sostienen y denuncian que la pandemia es el mayor crimen de la Historia, y aportan sólidas pruebas científicas que lo confirman. 

Ya han emprendido acciones legales contra los gobiernos que colaboran en esta operación criminal. No sólo eso, dada la inoculación masiva y mundial, algunos juristas hablan ya de crimen de lesa humanidad (como sucediera con los nazis condenados en el juicio de Nuremberg). 

A partir de ahora, y de no detenerse cautelarmente la vacunación, ya no cabría la eximente ni la atenuante de «obediencia debida», al existir fundadas sospechas del contenido tóxicos de esta «vacuna» experimental.

Recuerda dos cosas:

PRIMERA: la única forma de detener esto es vencer nuestro miedo y presentar los brazos magnéticos en el centro de salud u hospital donde nos vacunaron. Sólo entonces los médicos y el personal de enfermería, que mayoritariamente desconoce lo que sucede, detendrán la vacunación y exigirá explicaciones convincentes a sus gerentes y consejeros de sanidad.

SEGUNDO: el mal y quienes lo propagan no tienen la última palabra. Es hora de rezar cuanto sepamos, incluso un poco más. Confiemos en Dios, pues Él intervendrá justo cuando nuestros enemigos crean haber triunfado.

Mi libertad y mi responsabilidad empiezan y acaban aquí, compartiendo esta realidad con mi familia y amigos. Si consideras que lo expuesto puede beneficiar a otros, cuentas con mi aprobación y el consentimiento explícito para compartirlo. 

La información que aquí expongo, a pesar de estar contrastada, no puedo asegurar que esté exenta de algún error, involuntario por mi parte. Imprime este PDF y consérvalo: si estoy equivocado tendrás 50 razones para recriminarme, pero si estoy en lo cierto, entonces comprenderás lo que sucede, y sabrás cómo actuar. 

Considero que es mi deber, legal y moral, dar a conocer este engaño masivo. Parece que estemos asistiendo a una película de terror, pero ES REAL, y a veces la realidad supera a la ficción. Aun así, habrá muchos que nieguen o rechacen todo esto. No importa, conforme sucedió con Noé, podrán negarlo o burlarse, pero vivirán igualmente sus consecuencias. 

Por tanto, no voy a pedirte que me creas; es más, olvida cuanto he manifestado hasta aquí. Pero hay tres cosas que no deberías olvidar nunca, por estar basadas en la evidencia científica y refrendadas por una institución oficial pública, como es la Universidad de Almería:

PRIMERA: la vacuna lleva un agente tóxico que convierte los brazos de vacunados e hisopados en magnéticos.

SEGUNDA: Hay un informe oficial firmado por un grupo de científicos que trabajan en la Universidad de Almería que confirma la existencia de óxido de grafeno en un vial de la vacuna contra la Covid-19.

TERCERA: Los anchos de banda que emitirán próximamente las antenas 5G activan el óxido de grafeno, provocando muertes por infartos e ictus, y alterando las neuronas hasta provocar enfermedades psiquiátricas, tipo psicosis, esquizofrenias, trastorno bipolar y paranoias.

Por tanto, cuando próximamente veamos a personas sanas que mueren en la calle delante de nosotros, o familiares que presentan comportamientos extraños y repentinos, o alteraciones psiquiátricas graves, ya sabremos de qué se trata. 

Alejémonos lo máximo posible de las antenas 5G y exijamos con urgencia a nuestras autoridades civiles, alcaldes y jueces, así como a la policía y la guardia civil, que desconecten los cajetines de esas antenas. Con ello estaremos salvando cientos, tal vez miles, de vidas humanas.

Se hace realidad la frase: «Se puede engañar a todo el mundo durante un tiempo, se puede engañar a algunos todo el tiempo, pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo». ¡Muchos ánimos, pues no estamos solos!

Que Dios nos bendiga a todos, y la Santísima Virgen nos proteja bajo su manto.


 

ALGUNAS COSILLAS FRESCAS PARA MITIGAR SOFOCOS

 

DIÁLOGO FRONTERIZO

La era del pandemio, con el verano, se relajó un poco.

Al reclamo del turismo, tan económicamente imprescindible, los severos guardianes de la salud pública rebajaron la presión. 

-¿El estamento sanitario? 

-¿Pero qué dices?, ¡el Gobierno, hombre, el Gobierno!

¡Se nos permitía, consentía y concedía, tras un año bochornoso, transitar por calles y descampados a cara descubierta! ¡Aleluya!

Para mi sorpresa, el 90% de mis convecinos no se debió enterar y seguían enfundándose el pandemio hasta los ojos por todos los espacios públicos, excepto las terrazas de los bares, como ya era habitual anteriormente.

Para no molestarlos, al moverme por las aceras sin pandemio, procuraba esquivarlos pasándome a la calzada de los coches.

Un vecino, insólitamente observador, advirtió mis maniobras y me paró para preguntarme:

-¿Temes contagiarnos a los demás y por eso te apartas de nosotros?

-No, no, -le contesté- os esquivo por prudencia, para evitar que me contagiéis el miedo a mí.


EL POBRE VICENTE

Vicente, el valiente,

dos dedos de frente,

viendo de repente

virus maloliente

pensó el muy inconsciente

seguir la corriente

de la inmune gente

guapa y sonriente.

 

Y murió reciente

(¡vacuna indecente!)

por inconsistente

confianza ingente,

-fiel televidente-,

en los prepotentes.

 

Siendo un insurgente,

aún sería viviente,

sin perder un diente,

a la vera fuente

del tiempo clemente.

 

Culpa yo no siento

que aviséle a tiempo,

aunque sí lamento

tanto atontamiento

de quien no está atento

a lo que yo cuento.

sábado, 17 de julio de 2021

 ¿NOS ESTÁN SUICIDANDO?

 

CARTA ABIERTA A LA DRA. HENRY, DELEGADA PROVINCIAL DE SALUD DE BRITISH COLUMBIA

Dr Charles D. Hoffe, BSc, MB, BCh, LMCC
Lytton Medical Clinic,
P O Box 39, Lytton, BC, V0K 1Z0
Tel; 250-455-2202
Fax; 250-455-2237
Email; hoffe.charles@gmail.com

 

5 de Abril, 2021


Dra. Bonnie Henry,
Delegada provincial de Salud de British Colombia,
Ministerio de Salud
1515 Blanchard Street,
Victoria, BC, V8W 3C9


Estimada Dra. Henry

La primera dosis de la vacuna Moderna ya ha sido administrada a algunos de mis pacientes en la comunidad de Lytton, BC. Comenzó con los miembros de las Primeras Naciones [indígenas del Canadá] de nuestra comunidad a mediados de enero del 2021. Ya se han administrado 900 dosis.

Me ha alarmado la alta tasa de efectos secundarios graves de este novedoso tratamiento. De este número relativamente pequeño de personas vacunadas hasta ahora, hemos tenido:

1. Numerosas reacciones alérgicas, con dos casos de anafilaxia.

2. Una (presunta) muerte súbita inducida por la vacuna, (en un paciente de 72 años con EPOC [Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica]. Este paciente se quejó de que le faltaba más y más el aire después de recibir la vacuna, y murió de forma muy repentina e inesperada el día 24 después de la vacuna. No tenía antecedentes de enfermedad cardiovascular).

3. Tres personas con déficits neurológicos continuos e incapacitantes, con dolor crónico asociado, que persisten durante más de 10 semanas después de la primera vacuna. Estos déficits neurológicos incluyen: mareos continuos e incapacitantes, debilidad neuromuscular generalizada o localizada, con o sin pérdida sensorial. El dolor crónico en estos pacientes es generalizado o regional, con o sin cefaleas.

En resumen, en nuestra pequeña comunidad de Lytton (Columbia Británica), tenemos una persona muerta y tres personas que parece que quedarán discapacitadas de forma permanente tras su primera dosis de la vacuna Moderna. La edad de los afectados oscila entre los 38 y los 82 años. Así que tengo un par de preguntas y comentarios:

1. ¿Se consideran estos efectos secundarios normales y aceptables a largo plazo para la terapia de modificación genética? A juzgar por los informes médicos de todo el mundo, nuestra experiencia en Lytton no es inusual.

2. ¿Tiene usted alguna idea de qué procesos de enfermedad pueden haberse iniciado para estar produciendo estos síntomas neurológicos continuos?

3. ¿Tiene alguna sugerencia sobre cómo debería tratar la debilidad neuromuscular inducida por la vacuna, los mareos, la pérdida sensorial y los síndromes de dolor crónico o debería simplemente remitirlos a un neurólogo? Preveo que todo esto irá a más a medida que la vacuna se vaya extendiendo. Ésta ha sido sólo la primera fase y la primera dosis.

4. En marcado contraste con los efectos nocivos de esta vacuna en nuestra comunidad, no hemos tenido que dar ningún tipo de atención médica a nadie con Covid-19. Así que, según nuestra limitada experiencia, esta vacuna es claramente más peligrosa que el Covid-19.

5. Soy consciente de que toda terapia médica tiene una relación riesgo-beneficio, y que una enfermedad peligrosa requiere una medicina peligrosa. Pero ahora sabemos que la tasa de recuperación del Covid-19 es similar a la de la gripe estacional en todas las categorías de edad. Además, es bien sabido que los efectos secundarios tras la segunda inyección son significativamente peores que la primera. Así que lo peor está por llegar.

6. Hay que destacar que estas personas no eran enfermos que estuvieran siendo tratados por alguna enfermedad devastadora. Eran personas previamente sanas, a las que se les ofreció una terapia experimental con efectos secundarios desconocidos a largo plazo, para protegerlas contra una enfermedad que tiene la misma tasa de mortalidad que la gripe. Lamentablemente, sus vidas han quedado arruinadas.

7. Normalmente se considera un principio fundamental de la ética médica interrumpir un ensayo clínico si se demuestra un daño significativo del tratamiento en investigación.

8. Así que mi última pregunta es la siguiente: ¿Es ético desde el punto de vista médico continuar con el despliegue de esta vacuna, en vista de la gravedad de estos efectos secundarios que alteran la vida después de la primera inyección? En Lytton, BC, tenemos una incidencia de efectos secundarios graves (que cambian la vida de la persona) 1 por cada 225 con esta terapia experimental de modificación genética.

También me he dado cuenta de que los responsables del lanzamiento de esta vacuna no han notificado estos efectos secundarios inducidos por la vacuna. Soy consciente de que esto es a menudo un problema con las vacunas en general, y que los efectos secundarios retrasados después de las vacunas a veces son etiquetados como "coincidencias", ya que la causalidad es a menudo difícil de probar. Sin embargo, teniendo en cuenta que se trata de un tratamiento experimental, sin datos de seguridad a largo plazo, creo que tal vez habría que abordar también esta cuestión.

Además, me he dado cuenta de que el formulario provincial de notificación de lesiones por vacunas, que fue claramente diseñado para las vacunas convencionales, ni siquiera tiene lugar para notificar lesiones por vacunas de la naturaleza y gravedad que estamos viendo en esta nueva terapia de ARNm.

Ahora queda clarísimo, con la evidencia médica de todo el mundo, que los perfiles de efectos secundarios de las diversas terapias de modificación genética contra el Covid-19 han sido enormemente subestimados por sus fabricantes, que estaban ansiosos por demostrar su seguridad.

Gracias por su atención a este asunto de salud pública tan urgente.

Atentamente,
Dr. Charles Hoffe

 

Este es uno de los muchos ejemplos de alerta razonable (¡del pasado abril!) sobre los graves riesgos de una terapia génetica experimental para la covid-19, riesgos que han sido desestimados con alevosía por la Administración y por el estamento médico… pues el experimento continúa:

El siguiente movimiento criminal de la conspiración contra los seres humanos es la apertura masiva de emisiones 5G, con la que esperan producir nuevos daños orgánicos a todas las personas, pero en especial a los vacunados.

Comprendo que es inimaginable creer que se nos atemorice y engañe para, cuando menos, experimentar con nosotros globalmente, convirtiéndonos en cobayas humanas.

¿Qué pretenden? ¿Reducir la población mundial mediante debilitamiento y esterilización? ¿Hibridarnos poco a poco con alguna raza alienígena? ¿Controlar globalmente a la Humanidad  anulando su conexión espiritual? ¿Reducirnos a una forma de vida sin derechos humanos bajo un poder dictatorial al estilo de “1984” de Orwell?

Señores, considérenme un paranoico si lo desean, pero yo no puedo aceptar la historia oficial de la “nueva normalidad” que nos venden, mientras progresa su maquiavélico plan tan descaradamente, haciéndonos creer que TODO VA BIEN y se preocupan de nosotros.

Porque todo va realmente mal y cada vez más a peor, sólo hay que abrir los ojos para verlo, aunque antes es preciso querer desprogramarse de la secta GOBIERNO-Televisiva.

Sólo la verdad nos hará libres.      

viernes, 16 de julio de 2021

 

ENSAYO FILOSÓFICO CATASTRÓFICAMENTE INCOHERENTE

 

Los detalles disociados entre la mentalidad propia y la ajena me incitan a pergeñar una explicación razonable de mi punto de vista.

Una mayoría de ciudadanos CONFÍA decididamente en los representantes del Estado, que crean leyes, imponen decretos y proclaman a bombo y platillo su inequívoca determinación hacia el BIEN COMÚN.

Una minoría de ciudadanos DESCONFÍA con cada vez mayor contundencia de dichos representantes. Arrastran estos pobres ciudadanos una triste memoria de abusos del poder franquista y de desmanes y corruptelas asentadas en flagrantes impunidades de la dudosa democracia, a la que muchos autores designan directamente partidocracia.

La creencia en el PADRASTRO ESTADO, no se me ocurre otra explicación, proviene de la inseguridad e indefensión del individuo que se sabe dependiente del sistema burocrático y del mercado laboral y social. Los marginados del Sistema nos refuerzan la idea de lo poco conveniente que puede resultar intentar la independencia personal del Sistema imperante.

El estado actual de consumo ilimitado, (si poseemos reserva de divisas suficiente), y la estabilidad de la clase media, junto a las migajas para las clases sociales más desfavorecidas, propician una supervivencia general aceptable que no cuestiona adecuadamente las astronómicas desigualdades económicas y sociales.

Dichas desigualdades crecientes, apuntaladas por las habituales prácticas mafiosas corruptas de los dirigentes políticos y por la evasión de impuestos a paraísos fiscales de las clases más favorecidas, (banqueros, empresarios, políticos y artistas como el rey emérito…), propician cuantas crisis nos quieran imponer las oligarquías financieras.

Pero, ¿cómo reconducir a la BESTIA del dinero y sus acólitos corruptos y mafiosos hacia un sistema progresivamente igualitario, si ellos mismos dirigen y/o controlan todos los poderes del Estado en sentido contrario?

Los poderosos con mayúscula sólo se aman a sí mismos y su poder; sólo trabajan para asegurar su posición privilegiada y, como ya explicó un pensador de otra época, prefieren que reviente el mundo y perezca la Humanidad entera antes que bajarse del burro.

La era digital de las telecomunicaciones, sostenidas por numerosos satélites artificiales, favorece el control global de los individuos. Eso es fabuloso para quienes pueden hacer negocios, imponiendo tendencias comerciales, anulando competencias indeseadas, manipulando a políticos y otros funcionarios y asegurándose el crecimiento continuado de sus riquezas y poder.

El que lo tiene casi todo ya no piensa en otra cosa que conseguirlo todo; “ya que estamos, ¿por qué menos?”

La idea es buena, pero precisa de una alianza con otros poderosos para controlar un mundo con 7.000 millones de personas. Y en eso están. Se asocian en trusts maquiavélicos que dominan el mercado farmacéutico, las deudas de los países “soberanos” (ja), organizaciones de todo tipo, como ONGs, la OMS, los mercados de valores, etc.  

Las primicias ya no son una vacunación global con grafeno incluido, entre otras sustancias muy peligrosas, que permite la manipulación emocional y mental mediante fuentes de energía externa como el electromagnetismo, sino que se nos está proponiendo saltar a un nuevo sistema informático, Windows 11, que asume el control total de cada ordenador personal con la excusa de ofrecer seguridad absoluta.

Pero si pueden borrar programas, archivos, (incluso de unidades externas), impedir el intercambio de correos y bloquear o desconectar tu ordenador cuando les convenga a los dueños de Microsoft ¿te puedes sentir seguro?

La contradicción creciente entre derechos ciudadanos, que (¡alabado sea el Señor!) el Tribunal Constitucional ha ratificado frente al intervencionismo absolutista del Gobierno Central y los Gobiernos de Taifas con sus medidas antidemocráticas, sigue vigente desgraciadamente.

Todas las medidas impuestas a la ciudadanía han carecido de debate, investigación y una argumentación mínima. Para evitar la oposición ciudadana lógica a las medidas abusivas de los Gobiernos, éstos han impuesto el Pensamiento Único, el comité de expertos invisible, las medidas sanitarias anti producentes y la oportuna prohibición de las autopsias, el alarmismo exacerbado desde los medios de domestificación y las campañas vomitivas del pandemio y la vacunación más perversa de la historia, sin olvidar los confinamientos.  

Hablaba al principio de este artículo de los creyentes del sistema y los disidentes.

Tenemos libertad de elección pero asumiendo las consecuencias. Y si nuestra elección es vivir atemorizados, engañados y ninguneados  ¿conseguiremos al menos la ansiada supervivencia?

domingo, 4 de julio de 2021

 

Covid: ¿a quién le interesa fomentar el miedo?

Juan Manuel Blanco

 

Con una mayoría aplaudiendo la supresión de derechos y libertades, la pandemia ha descubierto el flanco vulnerable de las democracias actuales: el pánico

 La pandemia sanitaria finalizó en Europa y América del Norte, pero las sociedades siguen aferrándose a ella. Las muertes diarias por covid se dividen por diez, por veinte, hasta equipararse a otras enfermedades similares. Pero esta realidad no hace mella en una opinión pública que todavía confunde contagios con enfermedad y se rasga las vestiduras al detectar el virus en adolescentes que, como mucho, desarrollarán síntomas leves. El miedo impide comprender que, una vez vacunados los vulnerables, la circulación del virus no hace más que reforzar la inmunidad. La brecha entre realidad e imaginario es tan enorme, que ni el propio Hércules podría cerrarla.

Dio la clave, quizá sin pretenderlo, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias de España, Fernando Simón al declarar que las pandemias del futuro tendrán un impacto sanitario menor que la actual, pero su percepción social será igual o mayor. La gripe de 1918 causó una mortalidad 60 veces superior a la de la covid pero ésta ha tenido una repercusión social igual o mayor. Las epidemias podrán ser cada vez menos agresivas, pero se percibirán como crecientemente atroces. En definitiva, hoy lo fundamental para determinar la respuesta no es la gravedad de la pandemia sino cómo se percibe, no es la mortalidad que causa sino el miedo que genera. Lo relevante no es la realidad… sino cómo se la imagina la gente.

La pandemia de 1957, con una mortalidad comparable a la actual, no alteró la vida cotidiana ni desató el miedo; mucha gente apenas reparó en su existencia. Fue abordada eficazmente con medidas voluntarias, sin generar costes sociales. Ciertamente, la sociedad era muy distinta a la de hoy con individuos menos vulnerables emocionalmente. 

La diferencia fundamental estriba en los canales de difusión de la información. Si entonces dominaba la prensa de papel, hoy los responsables del constante flujo de noticias son las cadenas televisivas y las redes sociales, unos medios muy escorados hacia el pánico, hacia la psicosis colectiva, y dominados por ciertos grupos que parecen interesados en acrecentar esa brecha entre realidad y percepción.

Censura selectiva en las redes sociales

A pesar de dañar gravemente la economía, las restricciones a la movilidad incrementaron considerablemente las ventas de las grandes empresas tecnológicas, asentando así su posición dominante. Sus beneficios crecieron considerablemente en 2020: Google 162%, Facebook 94%, Microsoft 44%, Apple 110% o Amazon 220%. El índice de cotización bursátil NASDAQ, en el que predominan las tecnológicas, descendió al inicio de la pandemia pero se recuperó rápidamente, ascendiendo poco después hasta cotas históricas.

Ante este conflicto de intereses, la ética dictaba a estas empresas tomar una postura neutral pero, con el pretexto de combatir la información falsa (fake news), comenzaron a censurar sistemáticamente en sus redes sociales a quienes criticaban el alarmismo, a quienes defendían una postura no apocalíptica de la pandemia, a quienes proponían una vía alternativa a los confinamientos. Ejercieron así una influencia selectiva sobre la información, favoreciendo decisivamente a los difusores del miedo.

Las prohibiciones no afectaron únicamente a ciudadanos de a pie: con la excusa de defender la “verdadera ciencia”, censuraron también a destacados científicos, como los principales firmantes de la Declaración Great Barrington, los epidemiólogos Martin Kulldorf, (Harvard), Sunetra Gupta, (Oxford) o Jay Bhattacharya (Stanford). Su delito: proponer una estrategia para afrontar la pandemia que no contemplaba confinamientos sino medidas voluntarias con protección especial a los vulnerables, una línea que coincidía con los principios de salud pública vigentes hasta 2019. Tampoco pueden tacharse a sus propuestas de “no oficiales”, pues fueron seguidas, entre otros, por Suecia o el estado de Florida.

Precisamente, la censura por parte de Youtube (Google) de un vídeo en el que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, realizaba una extensa entrevista a los científicos de Great Barrington, marca una de las cotas más elevadas del despropósito. Como la amenaza de censura desencadena una fuerte autocensura para evitar el cierre de la cuenta, las grandes tecnológicas contribuyeron a asfixiar el debate público sobre la pandemia, justo cuando más necesaria era la confrontación de ideas, ensanchando así la brecha entre realidad y percepción.

Televisiones y expertos agoreros

El medio televisivo, creador destacado de mitos en esta pandemia, descubrió hace tiempo que el miedo atrae masivamente espectadores. También comprobó su enorme capacidad para manipular al público porque el cerebro humano está programado para dudar de lo que oye... pero no de lo que ve. Así, la pequeña pantalla ofrece una engañosa sensación de adquirir conocimiento sin esfuerzo. Al contrario que el cine, la tele nunca advirtió al espectador que su contenido informativo posee un elevado componente de ficción: es una visión muy sesgada y descontextualizada de la realidad.

La pandemia impulsó el surgimiento de una nueva figura televisiva, el experto mediático agorero, personaje encargado de convertir la noticia más trivial en una instantánea de terror. Hace años, los expertos ofrecían públicamente un juicio ecuánime, alejado del amarillismo, del espectáculo. Evitaban hablar de lo que escapaba a su especialidad y tendían a tranquilizar al público ante cualquier suceso preocupante. El nuevo experto mediático no es ponderado sino histriónico, habla con ligereza de cualquier asunto y no se dirige al intelecto sino a los instintos y emociones.

Asustar al público, reclamar frívolamente el encierro de la población sin llegar siquiera a imaginar los complejísimos efectos sobre la salud física y mental de la gente, sobre su nivel de vida o sobre sus derechos y libertades, son actitudes que recuerdan esa figura que, con cierta sorna, José Ortega y Gasset denominó el “sabio-ignorante”, ese individuo que conoce “muy bien su mínimo rincón de universo; pero ignora de raíz todo el resto”, ese sujeto que en los aspectos que desconoce toma “posiciones de ignorantísimo; pero las toma con energía y suficiencia”. Resulta poco prudente pontificar sobre la pandemia si, por ejemplo, se ignoran las nociones más básicas de estadística o de manejo de datos.

La intensa (auto) censura actual abrió un enorme campo de juego para el experto mediático: muchas mentes pensantes prefieren mantener silencio o hacer seguidismo, sumergiéndose de lleno en el pensamiento grupal. Pocos podrían imaginar el exagerado pavor que existe en los ambientes académicos al mero “qué dirán”.

Atrapados en las arenas movedizas

La opinión pública no es muy consciente de las arenas movedizas en las que nos hemos adentrado, del peligro que corren a la larga nuestros derechos básicos. A pesar de que los confinamientos han resultado ineficaces y causado grandes daños a la población, existe mucha presión para que las normas excepcionales se consoliden, se conviertan en ordinarias y sean de aplicación discrecional, como una soga que se aprieta o afloja a voluntad. La excepcionalidad tan prolongada ha favorecido el surgimiento de grupos de intereses, incluidas ciertas burocracias, que ejercen cada vez más influencia para enquistar la situación.

Con una mayoría aplaudiendo la supresión de derechos y libertades, la pandemia ha descubierto el flanco vulnerable de las democracias actuales: el pánico. En el futuro, cualquier enfermedad relativamente leve podrá ser amplificada por los medios hasta adquirir una percepción tan intensa, que mucha gente aclame el despotismo de los gobernantes. La distopía de Huxley, donde la población no se siente oprimida por la tiranía sino cómoda y aliviada, se torna más cercana que nunca. Pero también la de Orwell, porque quienes aplauden tales medidas no se conforman con encerrarse ellos en su casa… exigen que encierren a los demás.


Perdonad que insista con este nuevo artículo, (que un amigo nos ha facilitado), dado que lo menos preocupante ahora es el covid, habida cuenta de la maraña de ataques continuos contra las libertades y derechos ciudadanos, que está perpetrando un gobierno absolutamente obsceno y espurio, secundado por el resto de la clase política, los medios de comunicación y una parte del sistema sanitario sin conciencia.